La composición química del chocolate se destaca por su elevada concentración de polifenoles, principalmente flavonoides, una sustancia química que ayuda a prevenir los problemas cardiovasculares.
Los flavonoides del cacao se hallan en mayor concentración en el chocolate amargo, por lo cual el consumo de chocolate con leche o el chocolate blanco no muestra los mismos efectos beneficiosos. Esta sustancia también se encuentra en otros alimentos como el vino tino, el té verde y algunas frutas.
Consumir pequeñas cantidades de chocolate puede ayudar a prevenir enfermedades cardíacas, pero sólo si a la vez evitamos comer otros alimentos de alto contenido calórico, con el fin de mantener un peso estable. En la composición de los chocolates hay una alta cantidad de calorías y grasas saturadas, las cuales están relacionadas con el exceso de peso.
A pesar de la gran cantidad estudios que han mostrado los efectos benéficos del chocolate, todavía no existe un consenso sobre la cantidad óptima a consumir.
Es necesario remarcar nuevamente que para prevenir enfermedades cardiovasculares hay que llevar adelante una alimentación saludable.
Las consecuencias pueden ser la obesidad o el sobrepeso. Por eso hay que mantener una dieta controlada en calorías.