El enrojecimiento de los ojos no siempre es síntoma de conjuntivitis. Entonces ¿cómo saber si lo que tengo es conjuntivitis? Y en caso de que el diagnóstico sea positivo ¿el origen es siempre el mismo? ¿Cómo se trata? ¿Cuánto dura? Sólo algunas de las preguntas que surgen cuando los ojos muestran señales de que algo no anda bien.
Por definición, la conjuntivitis es la inflamación de la conjuntiva, la piel que recubre el ojo por fuera. «Se trata de un tejido con numerosos vasos sanguíneos, razón por la cual cuando se inflama se pone rojo», explica el médico oftalmólogo Rogelio Ribes Escudero.
Según el agente causal, las conjuntivitis pueden ser no infecciosas (alérgica) o infecciosas (bacteriana o viral). El sitio de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, ofrecen la siguiente caracterización para identificar el origen de cada una de ellas:
La causa probablemente sea un virus en los siguientes casos:
La causa puede ser bacteriana en los siguientes casos:
La causa probablemente sea alérgica en los siguientes casos:
La conjuntivitis infecciosa más común es la producida por el adenovirus, que es el mismo virus de la gripe. Es un cuadro muy contagioso, principalmente a través de las secreciones oculares, advierte Ribes Escudero, que es miembro de la Sociedad Argentina de Superficie Ocular e integra el servicio de Oftalmología del Hospital Alemán. «Por eso, es importante que los pacientes con conjuntivitis se aíslen socialmente hasta que el cuadro infeccioso se resuelva y que realicen una correcta higiene de manos con jabón y alcohol para evitar diseminar la infección. El cuadro puede durar entre 2 a 4 semanas. Por tratarse de un virus, no existe tratamiento específico, sino compresas frías, analgésicos y, en algunos casos, antiinflamatorios. Los antibióticos que se administran en estos casos no son para curar el virus, sino para evitar una contaminación bacteriana», aclaró.